Capitalismo consciente con los empleados.
Raúl Mendoza Cánepa
El capitalismo consciente es uno en el que las empresas se involucran con su sociedad y, por tal, no se trata solo de lucrar, sino de servir y hacerlo con calidad.
En las relaciones internas, los buenos gerentes siempre están y no dedican solo el tiempo sobrante a su negocio, sino la mayor de sus pasiones sin necesidad de delegar para descargar aquello en lo que debe poner atención
Lo que el gerente exige a sus empleados es lo que el mismo debe exigirse. Si busca el cumplimiento de la palabra, debe cumplirla. El estilo tayloriano de administración ya pasó y lo que prevalece es la horizontalidad y la institucionalidad, la empresa no es del jefe ni de su familia, es un todo social.
En una empresa del marco del capitalismo consciente las órdenes no existen, sino el llamado a colaborar asertivo porque el respeto es clave en la relación laboral y más aún cuando los salarios ralos invitan a lo que se denomina "salario emocional", que si no es el buen trato,, al menos es uno que excluye el grito, la conmutación o la amenaza.
La empresa requiere muchas perspectivas y todas encaminadas al bien común fuera y dentro de ella.