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La AFP y la necesidad de la gente

Raúl Mendoza Cánepa

Publicado: 2022-04-30

Parecía una buena idea en los 90, capitalizar tu ahorro y llevarte algunas décadas después una buena pensión.

Suena muy bien para un sistema de alta estabilidad en el empleo o rápida recolocación laboral. Es rentable mientras aportes e incrementes el ahorro y el capital en una cuenta en la que te confías. 

No se trata de juzgar las decisiones de tal o cual AFP, el problema es el aportante. En el Perú rige la informalidad y la mayoría de empleos no son seguros.

La idea puede ser buena en un entorno perfecto, pero no lo es ni para el mundo ni para el país ni para el aportante. 

El ahorro sin capitalización o con baja rentabilidad no sirve para sostener una pensión aceptable desde la línea de las urgencias del adulto mayor, que requiere no solo sostenimiento sino también cuidados a la salud. Complicado en un país donde lo único que ha funcionado son los fondos pensionarios de algunas instituciones, pero no el sistema privado y público.

El ideal es un sistema solidario que obligue a que ninguna persona mayor de 65 o 70 años se quede sin pensión. 

Con la pandemia y la crisis, muchos ciudadanos han priorizado el presente y sus urgencias. Intuyen que su ahorro previsional es insuficiente y que cada retiro en función de las UIT es un salvataje y más en un tiempo de desempleo. Perciben la realidad como el hombre que muere de hambre, pese a tener dólares bajo el colchón.

Con el enorme peligro que representa no tener una pensión, la pelota está en cancha del Congreso y del Ejecutivo. Atender los apremios de la gente (con el dinero de la gente) y diseñar un plan de atención más ambicioso que Pensión 65 para el futuro. Por lo pronto es un tema en suspensión permanente.



Escrito por

RAÚL MENDOZA CÁNEPA

Abogado PUCP. Escritor. Columnista en Expreso. Ha sido integrante del staff de la página de Opinión de El Comercio y de El Dominical.


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