El periodismo es un matrimonio con la verdad, no con cómo quieres que sean las cosas, que para eso sirve la abogacía. El periodista en serio guarda fe en las ventas por su reputación, pero no siempre la buena fe es bien pagada. El amarillismo, desde William Randolph Hearst ha tenido éxito como lo ha tenido el lenguaje de replana en el Perú desde Raúl Villarán. Ocurre que, como en todo, dar a la gente lo que quiere vende más que la honradez o la cultura.

Jorge Ramos, de Univisión, extracta lo que es ser periodista: "Si la gente no te cree, de nada sirve tu trabajo. La credibilidad y la confianza es lo único que cuenta en el periodismo. Y se gana a base de pura repetición; diciendo cosas que luego se comprueba que son verdaderas. Si la gente te deja entrar todos los días a su casa lo menos que puedes hacer es decirle la verdad. Que millones te sigan viendo, escuchando y leyendo después de tanto tiempo es un privilegio".

Ramos es optimista, vamos por todo lo contrario y más ahora que el periodismo impreso está en crisis, quizás tanto como el mecanismo de comunicar de los blogs. Internet se tragó todo y ahora todos somos periodistas, poetas o filósofos y varios con una buena lectoría, lectoría que comulga muchas veces con la necedad de quien postea.

Vamos por los diez tips del éxito de la prensa escrita en tiempos de Facebook:

1. Di la verdad y dila más contra el poder.

2. Que tu portada valga lo que una primicia, que ella sea tu pepa.

3. Recuerda que el impreso es un museo, lo que imprimiste en la madrugada fue lo que se habló ayer todo el día. Dale una variación y toca lo que nadie tocó.

4. Interconecta el impreso con el celular porque las noticias se leen desde el muro de un idiota o desde un portal serio con el mismo interés. Promociona desde lo virtual, los premios que puedes ganar desde el impreso...Quizás una bicicleta nueva. Me bajo del taxi desde el cual me informo y corro al primer quiosco.

5. La gente suele desviar los ojos desde las noticias al más bizarro avisaje. Dales el gusto. Combina, que el comercio y los servicios jalan más que las fotos.

6. Un manual de cómo cocinar el pescado vende más que el periódico, pero te hace vender el periódico.

7. Nunca faltes a la verdad, varía sí la manera de contarla.

8. Un crucigrama clásico y difícil es un reto, un logro utópico y nada ha vendido más en la historia que las causas imposibles.

9. Un crimen llama a los ojos según su narrativa, de hecho llama más que una campaña para que los basureros sean más puntuales. El morbo es parte de la verdad y la vida. No es un buen consejo llamar al morbo, lo es comprenderlo dentro del drama.

10. Sin pasión por la verdad no hay periodismo, pese a que la gente busque que le mientan. La pedagogía de la verdad debe formar lectores y, finalmente, leales clientes.